El oportunismo de falsos mesías

Foto de la Huelga General / rtve.es
BFM1050
Tal y como publica BÉJAR AL DÍA, la ciudad textil no ha secundado la Huelga General, pero sí la convocatoria realizada por Izquierda Unida contra la política del Gobierno Central.
Este hecho puede explicarse por muchos motivos, ponemos 3:

·       El miedo de los afortunados que tienen un puesto de trabajo temporal a quedarse sin empleo en esta época.
·       El gran número de parados bejaranos que, aunque hubieran querido, no han podido hacer huelga.
·       Y la desfachatez del apoyo a la misma por parte de algunos que fueron cómplices de la situación.
Todos ellos argumentos comprensibles, y que expondrían bien a las claras el por qué de no secundar una Huelga General, pero sí una concentración pacífica convocada únicamente por un partido político: Izquierda Unida.

Hay varias cosas que aquí no entendemos y nos llaman la atención.
En primer lugar, y a nivel local: ¿Por qué convoca IU la concentración y no los sindicatos mayoritarios de Béjar? ¿Por qué no hay un apoyo expreso a nivel local del PSOE a la huelga o a la concentración, como lo ha habido a nivel provincial, autonómico y nacional?
A todos los niveles: ¿Por qué hay oportunistas, falsos mesías, que se aprovechan de estas circunstancias?
Nos llama mucho la atención cómo algunos, a los que se les llena la boca haciéndose llamar progresistas y se postulan como poseedores de la verdad absoluta, ahora se suman al carro de la reivindicación desde el más ferviente dogmatismo fanático cuando no hicieron huelga en septiembre del año pasado porque... "como era Zapatero"..., y tampoco se solidarizaron el pasado 29 de marzo, cuando estuvieron trabajando mientras otros se partían la cara por ellos en las calles ejerciendo su derecho constitucional. Eso es, al menos, moralmente cuestionable. Eso es, al menos según el diccionario de la RAE, ser un OPORTUNISTA en el más peyorativo sentido de su connotación, en una "actitud sociopolítica que prescinde de los principios fundamentales, tomando en cuenta las circunstancias de tiempo y lugar, y aprovechándose al máximo para obtener el mayor beneficio posible, sin tener en cuenta convicciones".